ARTADI ES RIOJA
Hay un doble lenguaje en Juan Carlos López de la Calle que no alcanzo a entender en el asunto de la salida de Artadi de la DOCa Rioja. El bodeguero argumenta que Rioja no es su modelo y que no se identifica con él porque «somos el país que más superficie de viñedo tiene del mundo, el que más litros produce y el que más barato vende». La singularidad de los exquisitos y emblemáticos vinos de Artadi se ha basado en un estilo completamente diferente pero no único (ni mucho menos) en Rioja, y a su vez, Artadi ha crecido en el mundo entre otras cosas por ser Rioja, por sus viñedos excepcionales y bajo el paraguas que ahora rechaza. López de la Calle quedó retratado en este periódico con el vino ‘Valdepomares’, embotellado por Artadi para la cadena ‘Marks & Spencer’, que se vende en el Reino Unido al mismo precio que cualquier otro genérico de Rioja y del que se explica que «está cuidadosamente seleccionado por el enólogo; un vino vibrante y bellamente aromático». Es decir, con una marca ‘B’ y además con el logotipo del Consejo Regulador en la etiqueta se venden litros y más litros a través de una práctica legal pero con la que no comulga López de la Calle. Eso sí, con su gran marca coquetea con la excepcionalidad y la búsqueda de la diferenciación «con el convencimiento de que el valor de los grandes vinos está íntimamente ligado a la tierra, a los viñedos y a sus gentes», tal y como expuso en el comunicado en el que ha anunciado su adiós. Artadi es libre para hacer lo que venga en gana, incluso para liderar cualquier escisión en Rioja (cosa que dice que no hace, aunque el Gobierno Vasco esté al quite para lo que sea menester). Es libre para todo menos para una cosa: sus viñedos son pura Rioja y esas raíces de siglos no se conmueven con un comunicado aunque esté redactado con tanta humildad. # Este artículo lo he publicado en Diario La Rioja